El entrenamiento de ayer constó de 20´de calentamiento a
ritmo extensivo por los alrededores de Vitoria para hacer la primera subida del
día, eso sí a ritmo aeróbico intensivo (155-170ppm) con tranquilidad y sin excederse
de las pulsaciones. Para la primera cota del día elegí el puerto Zaldiaran, ya
al empezar a subir empezaron los problemillas, primero el viento que hacía de
cara, que para no variar es eterno en Vitoria y luego la cadera y el hombro. Si
subía sentado tenia bastantes molestias en la cadera y si me podía de pie el
hombro me molestaba más. Estos días aunque he salido a entrenar los entrenos
han sido en llano y no había que hacer tanta fuerza, pero en subidas todos
sabemos que hay que apretar y la cadera me decía que tururú y el hombro también.
Así que la subida la hice lo más adecuada a mi situación, sufriendo más que por
las patas por los dolores.
Una vez coronado carretera hacia Treviño a ritmo extensivo
hasta las faldas de la subida de Cucho donde tenía que hacer la subida a
aeróbico intensivo como en zaldiaran, aún con mis circunstancias decidí
intentarlo e intentar llevarlo lo mejor posible las molestias. Aquí no fue
mucho mejor la verdad y persistían las molestias, no fue aun así una subida
mala, pero nada que ver a otras veces y en otras circunstancias.
Una vez coronado vuelta de nuevo a Treviño y vuelta a las
faldas de Cucho para realizar la tercera ascensión del día, como la anterior persistían
las molestias, pero en esta las molestias se acentuaban más por lo que decidí
una vez coronado volver para casa y dar por terminado el entrenamiento del día
porque visto lo visto no era el mejor día ni estaba tan recuperado de la caída
como pensaba.
Después de lo sucedido estos días y como las molestias
perduran he de parar hasta por lo menos el domingo o lunes, según como vaya
evolucionando. Mejor parar ahora en esta época que en plena temporada, además
así evito que vaya a más y que pueda volver a rendir al mismo nivel.
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